Visita guiada de la Colina de las Cruces
La Colina de las Cruces, cerca de Siauliai, es un lugar inolvidable. Este sitio se sitúa a 12 Km al norte de Siauliai, en la carretera que lleva a Meskuciai. A pesar de las tentativas de los soviéticos para destruir este lugar, miles de cruces se erigen en este lugar sagrado. Las cruces, con sus mensajes escritos a mano, revelan mucho sobre la Historia del pueblo lituano y testimonian de su voluntad y de su fe. El papa Juan Pablo II, celebró allí una misa en 1993.
La razón verdadera de la existencia de esta Colina se encuentra enterrada en la Historia de Lituania. Durante siglos, este lugar es símbolo de una voluntad de paz de los católicos lituanos, a pesar de las amenazas sucedidas a lo largo de la Historia. Invadida por Rusia durante la división de la República de las Dos Naciones de 1795, Lituania desapareció completamente del mapa de Europa. Cuando se cayó la vieja estructura política de Europa del Este en 1918, Lituania declaró de nuevo su independencia. En aquellos tiempos, la Colina de las Cruces era un lugar dónde los lituanos rezaban para la paz, su país y los difuntos.
Hace poco, este lugar tomó una nueva significación, durante los años de 1944 a 1990 cuando Lituania oficialmente formaba parte de la URSS. El pueblo lituano mostraba su fidelidad para su identidad de origen, su religión y su patrimonio siguiendo viajando hasta la colina y dejando sus ofrendas. Sin embargo los soviéticos intentaron retirar esas cruces, particularmente pasando el bulldozer por lo menos tres veces. Pero nuevas cruces continuaban de aparecer y en 1985 las autoridades abandonaron.
El 7 de septiembre de 1993, el papa Juan Pablo II, visitó la Colina de las Cruces y la designó como un lugar de esperanza, de paz, de amor y de sacrificio.
Esta visita dura 6 horas. Puede organizarse con salidas desde Vilnius, Kaunas o Klaipeda.
